El éxito, es ese añorado estado en el
que una persona cumple su propósito, ese placentero y gratificante sentimiento de
conseguir lo que se quiere, todas las personas desean alcanzar el éxito en sus
vidas, sin embargo no todas lo alcanzan.
Cuando quieres aprender a "¿cómo
hacer algo?" necesitas aprender desde 2 puntos diferentes, en primer lugar
como si hacerlo, y en segundo lugar como no hacerlo. En este artículo analizaremos
lo que no debes hacer si quieres alcanzar el éxito en tu vida.
1. TRABAJAR EN TU ZONA DE CONFORT
La zona de confort es ese estado en el
que te sientes cómodo tanto física como mentalmente, donde hay nulos riesgos
y peligros, a priori, esta definición podría causarte cierto deseo de alcanzar
esta zona.
Sin embargo, es más perjudicial de lo
que crees, estar completamente cómodo y sin la necesidad de esforzarte, solo
anulara tu deseo natural de la mejora constante, la mejora constate solo se
adquiere enfrentado desafíos, corriendo riesgos, y aprendiendo de los errores.
Es decir, estando en una zona
completamente contraria a la zona de confort, la mejora constante es igual a crecimiento,
el crecimiento es igual a realización, y la realización provoca plenitud (algo
a lo que muy internamente todos los seres humanos aspiramos).
Además, escapar de tu zona de confort,
te permitirá tener deseos y metas más grandes y profundas, te hará ver más haya
de tus horizontes, lo que provocará que adquieras un gran conocimiento de las cosas.
Te forjará un gran carácter, te hará perseverante
y te mantendrá en la búsqueda de metas apasionante por concluir.
2. NO PLANIFICAR
Es curioso nadie planifica fracasar,
pero se fracasa si no se panifica.
La planificación es sumamente importante
para alcanzar el éxito, si planificas una ruta a seguir para alcanzar lo que
quieres, literalmente tienes muchas más probabilidades de concluir tus metas, a
comparación de alguien que no planifique.
Puedes tener grandes ideas, metas y
sueños que perseguir, pero si no tienes un plan bien estructurado, para conseguir
lo que quieres, esos grandes ideales nunca llegaran a hacerse realidad.
E incluso si tienes grandes aptitudes
valiosas, como la perseverancia, la disciplina o la organización, sin un plan,
no podrás conseguir lo que quieres, es como pretender llegar a las Bahamas,
simplemente subiéndote a un barco e ir a toda babor sin una dirección.
No importa que tu barco sea imponente,
fuerte y veloz, sin una brújula que guie su camino, este nunca llegara a las Bahamas,
por más que se esfuerce en navegar más rápido.
3. HACER DEMASIADAS COSAS A LA VEZ
Un concepto mal interpretado de la
productividad es: "el hacer y concluir varias cosas, es un gran signo de
productividad" esta premisa es verdadera, pero no de la forma que crees.
La premisa nunca dice que todas las
actividades deben hacerse al mismo tiempo, simplemente dice que una persona que
concluye varias cosas es una persona productiva.
Hacer varias cosas al mismo tiempo solo
te hace improductivo, pues no puedes concéntrate en ninguna de las actividades
a realizar, y no solo aplica para tareas del día a día, sino que también para
proyectos, metas y sueños a alcanzar.
No puedes trabajar con el 100% de tu
capacidad en 3 o 5 proyectos a la vez, debes concluir una meta, o por lo menos
avanzarla lo máximo posible, que solo necesite una mínima parte de tu tiempo
para concluirse, y solo entonces podrás empezar otro proyecto.
Si pretendes que podrás manejar
perfectamente varios proyectos, solo te estas engañando, tu energía y tiempo diario,
es limitado, por lo que tendrás que repartir el 100% en porcentajes más
pequeños, para gestionar tantas actividades.
Y eso es un error garrafal, pues para concluir
un proyecto, este requiere del 100% de nuestro enfoque, y si divides tu enfoque
en varios proyectos, al final tendrás que terminar decidiéndote por un solo
proyecto, o bien resignarse al fracaso en todos tus proyectos.
4. EVITAR LA RETROALIMENTACIÓN
Si eres una persona con grandes ambiciones
y metas por cumplir, las criticas y ataques están a la vanguardia de tu día a día,
sin embargo, debes a aprender a diferenciar entre una critica ofensiva o
destructiva, de una critica constructiva llena de retroalimentación.
La escucha y corrección de tus errores,
a través de críticas constructivas, es un gran mecanismo de mejora constante, por
ello siempre analiza las criticas dadas con buena fe, normalmente estas suelen
venir de personas que te aman, admiran, respetan o incluso siguen.
El conocimiento no está encapsulado en solo
unas pocas personas, sino que esta repartida entre todas las personas,
claramente más concentrada en unas que otras, pero todos poseen algo que
enseñar.
Por ende, no discrimines ni una sola opinión.
Y en cambio, aprende de todas, incluso las dadas con mala fe, pueden darte grandes
enseñanzas, como el porque del odio de otra persona o darte cuenta del
escenario en el que vive la otra persona.
5. RODEARTE DE LAS PERSONAS EQUIVOCADAS
Todo lo que ves, oyes, escuchas, hablas
y haces influye fuertemente en ti, y en tu capacidad de alcanzar el éxito, por
ende, evalúa bien con quien te juntas, a quien le desvelas tus proyectos, y en
quien confías.
No vaya a ser que estés con las personas
equivocadas, y estas solo reduzcan tu progreso, o peor aún, que te desvíen de
tus proyectos, siempre busca a las personas adecuadas, que compartan tus
interese y te impulsen a alcanzar lo quieres, ya sea directa o indirectamente.
Apartar a las personas que han estado en
un buen tiempo de nuestra vida, es difícil, pero necesario, nunca debes cegarte
y mantener a una persona en tu vida, solo por el simple hecho de que esta lleve
un buen tiempo conviviendo contigo. No tienes porque dar explicaciones, las
relaciones no se mantienen por compromiso o lastima.
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